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2/18/2011

Desde la aldaba


Te llamé por tu nombre
y nadie salió a la puerta.
La puerta estaba cerrada,
herméticamente fuera
de orden, colgada
del marco o suspendida
de la nada…
Y, ¿quién soy yo,
dime tú? ¿quién soy yo
para llamarte o exigirte
o decirte unas palabras;
si sólo quiero mirarte
desde la aldaba fría 
y el mirador?

Te llamé por tu nombre
y nadie salió a la puerta.
© Derecho de Autor María del Mar - 2009- 2010

2 comentarios:

  1. Te felicito, tu poema me ha llegado...a veces amiga aunque se llame una y otra vez la puerta se mantiene herméticamente cerrada
    Un abrazo
    Stella

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  2. Tristes ecos los de la aldaba y tu llamada cuando sólo reciben la respuesta del...silencio.

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