Seguidores

7/15/2012

El hilo de la suerte

EL HILO DE LA SUERTE

                " Dedicó toda su vida a recorrer
ciudades que nunca fueron suyas..."
                                        José Ramón Calatayud


Nací donde el sol sujeta, a su antojo,
el hilo de la suerte;
y no habido sangre para salvar
mi juventud de la muerte
o del desprendimiento que aún
cargo conmigo.

Nunca quise pisar este lugar
divino, capaz de enfriarme
los huesos y hacerme cambiar
el ciclo de lo que ya estaba
escrito o grabado en el prado
de Cienfuegos.

Y no es un juego, lo que expresan
mis palabras, sino más
bien es un grito nacido de no sé
dónde, ahora que la lluvia
me aferra a los recuerdos
y los abraza.

Pero eso es cosa mía el dolor
que siento en mi pecho.

Ah,
'¡qué voy a decir! si casi no puedo
todavía alzar mis sueños
del árbol de la vida, ni regresar
al tronco en donde escribí
mi nombre ni volver a la acera
en donde pinté los contornos
de mi adolescencia fugaz.

La pena que me deshoja la llevo
conmigo, la impotencia, la pérdida
de la candidez, el clamor de los libros
hablándome en un idioma extraño
en el tiempo de las certidumbre.

Ahora camino en ciudades conocidas,
en aceras sin baches
y parques sin glorietas…
quizás ya no camino.

Ah,
la fiesta acabó cuando el deseo
de la patria apretó los hilos
de la suerte, y no hubo sangre
para detener la juventud o el eco
de los versos unidos a mi memoria.

Hoy no es un buen momento
para recordar lo muerto, lo sé,
lo sé, es cierto que no han pasado
los años. Es sólo un sueño.

  © Derechos Reservados/USA
Prohibida la Reproducción total o parcial,
por cualquier medio sin la autorización de la autora.
María del Mar - ISBN 1-257899-05-4